Las binas y el aclareo

Con el transcurso de los días, en el huerto debemos realizar múltiples trabajos, los cuales suelen ser: plantar, regar, controlar y cosechar. Pero dentro de estas operaciones hay muchas labores intermedias a realizar en nuestro pequeño trozo de tierra. La bina y el aclareo son dos de éstas. Personalmente yo no practico demasiado la bina, pero supongo que lo importante es conocer, y en caso de necesitarlo , saber que eso realmente se hace y no es un experimento que vaya a destrozar el cultivo.


La bina: También llamada escarificación tiene por función mullir la superficie de la tierra, para aliviar el compactamiento superficial del suelo llevado a cabo por la acción de los ajentes metereológicos. Su uso ayuda a evitar la evaporación del agua y a potenciar la actividad de los microorganismos del suelo.
Se debe evitar realizar la bina demasiado profunda, para evitar la rotura de las raices superficiales. Cuanto mayor sea el desarroyo de las plantas se debe hacer de manera más superficial. Esta operación se puede llevar a cabo con un garfio, una especie de tridente que visto de lado está torcido como un garfio.

El aclareo: Seguramente esta os será más conocida. Esta operación la emplearemos por igual si vamos a plantar directamente sobre la tierra, o si queremos hacer plantel en maceta, o en vasitos de yogurt. Se realiza tras la siembra, y consiste en eliminiar las plantas demasiado cercanas las unas con las otras, respetando la distancia final si estamos sobre la tierra del huerto, dejando una sola planta si es en vasito de yogurt o similar y pudiendo dejarlas un poco más compactas si está en maceta y las repicaremos o las transplantaremos más tarde. El motivo del aclareo es evitar que las plantas lleguen a competir entre ellas, pudiendo afectar esta competencia en el futuro crecimiento y desarrollo de las plantas.
El aclareo en un huerto pequeño, o para maceta, suele hacerse a mano.